DEIA:
¿Qué es el Partido del Karma Democrático?
BOSCO SAN MARTIN: Es
una deformación política que surge para fomentar el libre
persamiento, el amor libre -sobre todo de impuestos-, las comilonas,
las cenas y las borracheras como auténtico embrión democrático de
la sociedad.
D. : Su lema reza «El
voto inútil, el voto como tú». ¿Están llamando inútiles a sus
votantes?
B. S. M. : Es un
llamamiento a aquella gente que en otras elecciones se ha preguntado dónde
irá su voto. Ahora tendrá la conciencia suficientemente tranquila
porque su voto inútil se lo dará a unos que saben lo que hacen.
D. : ¿Cuál es su
programa electoral?
B. S. M. :
Reivindicamos convertir los centros comerciales en centros
beberciales, sembrar el Teide y buena parte de la cordillera Cantábrica,
amén de los Pirineos, de marihuana, suprimir la Navidad como tal y
denominarla “compra gilipollas”, ídem con las rebajas de enero
que serán “vuelve a comprar gilipollas”.
D. : Eso es
imposible.
B. S. M. : Contando
con 30.000 pesetas de presupuesto, aspiramos a gobernar en solitario.
Lo hacemos por una cuestión de pasta. Recientemente hemos creado una
plataforma que se denomina ¡Pasta ya! Estamos recolectando firmas y
en los próximos días tenemos previsto hacer una manifestación que
partirá del Teatro Arriaga.
D. : ¿Dinero sin
trabajar?
B. S. M. : Pues sí.
Hay mucha pasta pero nadie sabe muy bien donde está.
D. : ¿A quien se
dirigen?
B. S. M. : A gente
joven pero también a jubilados que pasan de Benidorm y prefieren
salir de poteo con nosotros.
D. : La juventud está
muy desmotivada. ¿Qué les queda?
B. S. M. : Nos queda
el voto inútil. Estudiamos una carrera, ocho años de inglés, francés
y alemán para luego ¿qué? Somos la gente más preparada de la
historia y la que las está pasando más putas. La gente joven tiene
mucho que decir y nos quieren vender el rollo de que no se puede hacer
nada.
D. : ¿Qué es el
humor desaprensivo?
B. S. M. : El humor
desaprensivo es un humor ácido, negro.
D. : ¿Cuál es su
filosofía de vida?
B. S. M. : Nuestra
forma de vida es reirnos, empezando por nosotros mismos, e intentar
llevar esa risa a los demás.
D. : Y, ¿las cosas
serias como el trabajo?
B. S. M. : Es un
bien de primera necesidad que debería ser regalado. Más que un
derecho al trabajo reivindicamos un derecho al bienestar.
D. : ¿Comunistas?
B. S. M. : No. Somos
gente con amor, amorfos.
D. : ¿Contra qué
se revelan?
B. S. M. : Contra
madrugar. Se trabajaría mejor a partir de las cuatro de la tarde y
con fines de semana más largos.
D. : Convenza a un
parado para que le vote.
B. S. M. : Que nos
llame que le facilitamos alguna revista “Karma dice” para que se
descojone.
D. : Si fuera
alcalde...
B. S. M. : Si fuera
alcalde legalizaría la marihuana y facilitaría condones y pisos para
el sexo. Pero que la gente esté tranquila porque seríamos más
felices.