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 Friki Power  
XIII Semana de Cine 
Fantástico y de Terror Está 
claro que no todo iba a ser disecar cuerpos de indigentes y colarse en los cines 
por las noches a través de las alcantarillas. Y como hacía tiempo que no veía 
a la familia marché hacia tierras donostiarras, escalpelo en mano, para asistir 
a la Semana de Cine Fantástico. Tanto friky junto no puede ser bueno... al menos 
para ellos.   El fin de semana de 
inauguración fue el de calentar motores. Pase de cortos (digo que los pasan, 
no que pase usted de ellos), degustación de películas ukranianojaponesas de 
gore crepuscular, pasacalles de zombis con el colon de látex... Más o menos 
como en Cannes, pero sin canapés. Transcurrió la semana entre visionado, 
exposición, sobredosis de trementina y nuevo visionado. Y por fin, el sábado, 
la entrega de premios de cortometrajes. Txorro, 
Morro y Patxarán  El sarao 
tuvo lugar en el Kursaal con un tal Santiago Segura como maestro de ceremonias. 
Se pasaron cuatro cortos y luego se dieron los premios. El ganador absoluto ("Duck 
Children"), sobre unos niños vestidos de patos a los que un tipo vestido de 
cazador les vuela la cabeza sobre un escenario, me pareció muy instructivo. 
Los asistentes también lo celebraron, pataleando y escupiendo al jurado.  El 
premio del público fue para "Der Schlangemann", un publirreportaje sobre 
muñecos Ken con un pene de 30 centímetros. Educativo. Impagable el momento en 
que el pibe le taladra a Barbie la entrepierna y se la tira al grito "Yo soy Adolf 
y tu eres Eva". Por allí se pasaron Paul "dondestámigillette" Naschy y 
un venerable Jesús Franco. Tras un paréntesis pseudoerótico en el que un tarao 
con máscara de sado se paseó desnudo por la platea, proyectaron "Posesión Infernal". 
Nos vendieron que era la versión remasterizada, pero la única diferencia con la 
de toda la vida era que se oía a la vez por los dos altavoces. Hachazos por aquí, 
vómitos amarillos por allá, cámara subjetiva a falta de otra cosa y Bruce 
Campbell con cara de apanao. Sam Raimi cuando no había pasta. Terminé el 
bocadillo de panceta y regresé a mi mazmorra con una resaca de mil demonios.  © 
humorenlared.com - Actualizado el 05-12-02  |