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               Combate el mal 
                aliento 
              El que no depende de tu boca putrefacta 
                y tus dientes mal pulidos. Si no hay brazos, no hay chicles. 
                El aliento de las pilas rancias de hojas amarilleadas por el sol 
                o la oscuridad, qué importa. Tu sobaco también 
                puntúa. Combátelo, porque pronto vas a estar rodeado 
                de gente como tú o más guapa, que tampoco es difícil. 
                Ya es septiembre, otra vez. Quizá pensabas que este mes 
                de transición a la nada iba a quedarse esperando 
                siempre. Qué idiota has sido. 
              No y que sepas que todas las noticias 
                malas están por llegar. Titulares y conectamos con Jerusalem 
                o Villa Tortas. Llegarán tus cólicos y tus pencos 
                uno detrás de otro. ¿Por qué a ti? Llegarán 
                los docentes ineptos. Llegarán las elecciones y 
                sus carromatos de fantasía. Llegarán los días 
                fríos y apestosamente grises con la lluvia mezquina. La 
                que embarra pero no empapa, más o menos como tu vida 
                sexual. 
              Y ahí estarás. Porque 
                antes que nada tienes que matricularte de algo, todo, parte 
                o de nada. Porque la nada es lo que te espera si no te lo tomas 
                en serio de una vez. ¿O acaso crees que hay bofetadas 
                ahí fuera por hacerse contigo?. Mira a tu alrededor. 
                Levanta la cabeza de estas palabras. Toda esa gente va dejando 
                sus palominos bien marcados, pero se les nota menos que a ti. 
                He ahí la diferencia. 
               
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                - Actualizado el 01-09-04  
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