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               Hay que despistar 
                al enemigo  
              No encontrarán 
                nada  
              Saddam Hussein, pechuga o Alá. 
                Nacido el 28 de abril de1937 en una familia de campesinos. Tiene 
                dos esposas y alguna que otra cadena. Desde 1979 es el máximo 
                líder iraquí. En 1990 tras perder una partida de mus, invadió 
                Kuwait para hacer frente a la deuda. Hoy está en el ojo del huracán, 
                acusado de estar bien armao.  
              KARMA dice: Señor Hussein, Estados 
                Unidos y Gran Bretaña le acusan de desarrollar armas de destrucción 
                masiva e insisten en la necesidad de actuar urgentemente contra 
                usted.  
              Saddam Hussein: Sí, claro, 
                también pueden acusarme de jugar al monopoly, de no comer anchoas 
                en vinagre o de hundir el Prestige. En la guerra contra Irán fueron 
                ellos quien me ofrecieron el apoyo económico y armamentístico. 
                ¿Ahora qué?¿No les valgo? Estoy cansado de retórica barata y especulaciones 
                aéreas. Quieren nuestro petróleo. La historia se repite. Donde 
                dije pillo, digo Trillo.  
              Kd: Cuéntenos la película desde 
                el principio.  
              SH: Yo conocí a Bin Laden 
                en un cabaret de la base militar de Rota. Estábamos de entrenamiento, 
                experimentábamos con ácido, bombas nucleares, seleccionábamos 
                cobayas humanas, snuff-movies, penas de muerte... esas cosas de 
                la CIA. Teníamos un numerito que tuvo gran éxito entre los marines. 
                Se llamaba "Fist-Fucking al pil-pil". Yo cortaba salchichón en 
                el escenario, me llamaban el "carnicerito de Bagdad".  
              Kd: Datos, queremos datos...  
                 
              SH: Les jodió que fuera a 
                mi pedo. Primero hicieron la Operación Tormenta del desierto, 
                que es como Operación Triunfo, pero sin tanto pijo llorando. Después 
                la del Zorro de desierto para destruir nuestra infraestructura 
                militar. ¿Qué más datos necesita? Le podría contar lo que usted 
                quiera. Sé mucho. Tal vez demasiado. Sólo decirle que conocí a 
                Ana Botella de becaria en la Universidad privada de Bagdad.  
              Kd: ¿Becarias? 
               SH: Sí, antes de divociarse 
                de Leo Bassi, la mujer trompa estaba obsesionada con la ruleta. 
                Así conoció a Aznar, en un casino virtual. Lo habían perdido todo 
                y decidieron casarse y meterse en el PP para recuperar la inversión... 
                 
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                - Actualizado el 03-02-03 
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