José Luis López Vázquez y Paco Rabal lo bordan

Más Adentro
que en las primeras filas no hay sitio...

Una de las grandes favoritas para concursar en los Oscars, "Mar adentro", el último trabajo del enigmático y recién salido del armario Alejandro Amenábar, cuenta la historia real de Ramón Sampedro, un tetrapléjico que anheló durante gran parte de su vida encontrar la vida en su propia muerte.

Amenábar tira de sus manidos recursos cinematográficos para, de una historia digna de telefilme, hacer una buena película que, sobre todo, será recordada por el inmenso papel que hace Javier Bardem. Bardem, que ya más bien parece un camaleón (igual que Fernando Trueba, pero por motivos diferentes) de los personajes, se mete en la piel de Ramón Sampedro. No lo hace literalmente, que sería delito, si no gracias a una gran labor de maquillaje y pote y, por supuestísimo, a sus dotes interpretativas.

Sorprende también que Amenábar se haya fijado en Belén Rueda para darle el importante papel que la actriz de "Los Serrano" interpreta. Parece mentira que aquella chica medio lela que salía en "Vip noche" lo borde en este film. Algo bueno tenían que hacer los Rueda, aparte del vino blanco de aguja. Miedo me entra como la gran pantalla intente rescatar a Emilio Aragón para protagonizar la epopeya de la isla Perejil.

Uno de los aciertos del film es que la historia no se queda en un publi-reportaje a favor de la eutanasia ni nada parecido. Eso se lo dejan a los anuncios de Corporación Dermoestática. La película ahonda en el día a día de un hombre atado a su cama por culpa de una caída tonta. Lo cierto es que Mitch Buchanan y toda la caterva de vigilantes de la cala podían haber hecho algo más de lo que hicieron. Pero ya se sabe, cuando uno está más preocupado en entrenar a equipos de Dodgeball que en salvar vidas pasa lo que pasa. ¿Que no sabes de qué te hablo? Vete a ver "Cuestión de pelotas" y me cuentas.

Pero volvemos a la película que nos atañe. El gran logro del film es que después de tantas críticas en esta revista haya estado tentado de hacer una medianamente seria. El poder del cine es grande. Pero no tanto. Resumiendo. Una gran película. Pero que no te cuenten el final, que te la joden entera.

© humorenlared.com - Actualizado el 08-10-04

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